Aquí, Madrid, dos mil nueve;
una mujer sola.
Una mujer llena de Abril
de indeleble destierro bajo cielo gris
dirigiéndose hacia la ambigüedad fútil
hacia la confusión del confeso y de las errantes
quimeras - y la indulgente primavera
ya en abrupto llanto, Mayo, de lluvia…-
Aquí, Madrid, entre travesías
y distancias, una mujer: una mujer sola.
- Pronto se plantará mayo y después junio,
y abundante sombra, y finalmente, la evidencia-.
Una mujer con un recuerdo para nada
delante de su capricho para todo.
2 comentarios:
Viendo tu entrada...
te dejo esto
http://www.youtube.com/watch?v=uyroxImKc6I
Super bonita, espero que la disfrutes.
Publicar un comentario